Ingredientes:
8 huevos cocidos
2 cucharadas de aceite de oliva virgen
1 cebolla muy picada
100 grs. bacon picado (o soja texturizada)
400 grs. de champiñones troceados
1-2 cucharadas de harina de garbanzos
1/2 manojo de perejil fresco muy picado
Queso rallado para gratinar
Nuez moscada
Pimienta negra
Sal
8 huevos cocidos
2 cucharadas de aceite de oliva virgen
1 cebolla muy picada
100 grs. bacon picado (o soja texturizada)
400 grs. de champiñones troceados
1-2 cucharadas de harina de garbanzos
1/2 manojo de perejil fresco muy picado
Queso rallado para gratinar
Nuez moscada
Pimienta negra
Sal
Preparación:
Cocer los huevos. Dejar enfriar, pelar y cortar longitudinalmente por la mitad. Colocarlos en una fuente de hornear.
En una sartén grande calentar el aceite y saltear la cebolla picada. Añadir el bacon, remover un poco y agregar los champiñones cortados en trozos (o láminas). Sofreirlo todo removiendo de vez en cuando hasta que los champiñones comiencen a soltar su jugo.
Agregar la harina poco a poco (puede que no se necesite usar la segunda cucharada) y remover rápidamente para integrarla. Dejar hervir suavemente durante unos 5 minutos. Añadirle un poco de nuez moscada y salpimentar. Debe resultar una salsa consistente y ligada pero de ningún modo espesa. Si es necesario aclararla con un poco de caldo o leche.
Retirar la sartén del fuego, poner el perejil y remover. Verter el contenido sobre los huevos cocidos. Espolvorear un poco de queso rallado (usé Emmental) y meterlo a gratinar a horno suave hasta que esté dorado.
En una sartén grande calentar el aceite y saltear la cebolla picada. Añadir el bacon, remover un poco y agregar los champiñones cortados en trozos (o láminas). Sofreirlo todo removiendo de vez en cuando hasta que los champiñones comiencen a soltar su jugo.
Agregar la harina poco a poco (puede que no se necesite usar la segunda cucharada) y remover rápidamente para integrarla. Dejar hervir suavemente durante unos 5 minutos. Añadirle un poco de nuez moscada y salpimentar. Debe resultar una salsa consistente y ligada pero de ningún modo espesa. Si es necesario aclararla con un poco de caldo o leche.
Retirar la sartén del fuego, poner el perejil y remover. Verter el contenido sobre los huevos cocidos. Espolvorear un poco de queso rallado (usé Emmental) y meterlo a gratinar a horno suave hasta que esté dorado.
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